Hoy comienzo a respirar. A vivir.
No se por que estoy aquí. Ni siquiera quienes son los que me rodean.
Me observan con mucha atención, como si fuese algo nunca visto.
Me siento extraño en este ambiente tan hostil.
Quiero volver al lugar caliente del que salí. Allí donde todo tenía su sentido.
Me zarandean sin piedad. Se ríen, aunque a mí no me haga gracia alguna.
Les intento decir que me dejen, pero no me logran entender.
Estoy muy asustado y no se que esperan de mí.
Pero cuando creía que todo iría a peor, algo cambia.
Alguien me sostiene entre sus brazos.
Ahora si me encuentro a gusto. Algo me dice que aquí estaré seguro.
Algo me dice que esta persona es mi mama.
Para Andrés de ROMUALDO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario